La inteligencia emocional se ha convertido en una de las fuentes clave de crecimiento en ámbitos como el laboral y personal. Esta define un conjunto de habilidades que permiten un mejor entendimiento de las situaciones o del entorno y la manera en que estos influyen en los sentimientos de las personas. Saber controlar este tipo de reacciones a estímulos externos comprende el mayor campo de estudio de esta rama de la psicología, y son innumerables las ventajas de estar en la capacidad de controlar las emociones y entender cómo tratar con los demás dependiendo de cómo me siento o de cómo se que voy a reaccionar.

Además de tener la habilidad ser consciente de cómo reacciono frente a los cambios de externos, este tipo de inteligencia también es determinante en la capacidad de relación con los demás, pues brinda la posibilidad de entender y ser conscientes de la manera en la que se están sintiendo las personas alrededor. Esto último hace que nuestro nivel de empatía aumente y seamos mejor recibidos por los demás.

El objetivo general de este curso es comprender el funcionamiento de la inteligencia emocional y cómo su desarrollo permite el crecimiento personal y profesional por medio de la aplicación estratégica.